El plan de desescalada que ha anunciado el Gobierno este martes, consta de cuatro fases diferenciadas, en cada una de las cuales se permitirá ir realizando más actividades, siempre con medidas de seguridad e higiene, hasta llegar a lo que Pedro Sánchez denominó en la rueda de prensa como "nueva normalidad". 

Estas cuatro fases tendrán una duración mínima de cuatro semanas, aunque se podrán modificar los tiempos dependiendo del desarrollo de la pandemia y teniendo en cuenta cada parte del territorio, ya que será una desescalada asimétrica. 

Así, según informaba el Gobierno, la apertura de terrazas se llevará a cabo cuando el país entre en la fase 1, que está prevista para el 11 de mayo. La apertura de las terrazas se realizará reduciendo la ocupación de estas a un 30%. 

También se permitirá la apertura de ciertos comercios y locales con medidas de restricción como, por ejemplo, la atención individualizada y la cita previa. Los lugares de culto o los centro de alto rendimiento también abrirán en esta fase 1, también con medidas restrictivas.